Académico Ricardo Santander, Vicedecano de Docencia de la Facultad de Ciencia: “Hay que potenciar la calidad en nuestra institución”.

¿Qué espera de un Sistema Institucional de Calidad?

“Entre muchas otras esperanzas que tengo, me parece que hay que potenciar la calidad existente en nuestra institución. Es algo necesario que sin duda ayudará a fortalecer las relaciones al interior de nuestra Universidad de Santiago. Este plantel tiene diversos componentes de afectos que están muy marcados, pero también hay una cantidad significativa de procesos, incluso cotidianos que se ven retardados en su ejecución, porque falta un mayor vínculo de estos nexos afectivos. Esperamos que, con el advenimiento del Sistema Institucional de Calidad, estos procesos afloren y podamos afrontarlos con la tolerancia necesaria”.

¿De qué manera la implementación de un Sistema Institucional de Calidad es un componente clave para el desarrollo de la Vinculación con el Medio?

“Una de las tareas imprescindibles que debemos acometer al interior de la Universidad de Santiago, es aumentar significativamente la vinculación entre las Facultades. Esto se debe a que las políticas locales que rigen son diferentes entre las distintas unidades académicas, lo que dificulta el desarrollo de actividades mancomunadas. Creo que, al consolidar un Sistema Institucional de Calidad, habrá un impacto positivo en la Vinculación al interior de nuestra Casa de Estudios y sin duda su consecuencia redundará en una natural, efectiva y valiosa vinculación con el medio, escenario que beneficiará a todos los integrantes del plantel”.

Desde un enfoque de mejora continua, ¿cuáles son los principales agentes del medio que deberían ser considerados?

“Se deben integrar programas que contribuyan a mejorar la sintonía propia de la Universidad. En este plantel, a lo largo de la historia, han nacido ideas centrales que han aportado significativamente al país. En la época de la Universidad Técnica del Estado, se creó el programa de la Licenciatura Académica en Matemática (LAM) que permitió la alfabetización en matemática de Arica a Punta Arenas, con doctores norteamericanos y chilenos. Este programa nació acá, en nuestra Universidad, y aún hay “lamistas” por todo Chile, que siguen actuando empapados de estos principios. El sentido de estas políticas son las que se deben implementar y retomar. En esta misma dirección de pensamiento, desearía que con el tiempo el Proyecto que se realiza actualmente entre las Facultades que poseen Carreras de Pedagogía, cuyo objetivo es mejorar la Formación de Profesores, consiga aportar a nuestra juventud el ideario y la impronta de la USACH”.

Rescatando su experiencia en la Universidad de Santiago, ¿por qué es importante implementar un Sistema Institucional de Calidad?

“Porque es un componente clave. Nos permite mantener controles y evaluaciones cada cierto tiempo, ya que eso demuestra una preocupación por consolidar una cultura de la calidad en nuestra Universidad. Estamos viviendo procesos de cambios en el marco legal que rige a las universidades del Estado. Entonces, ¿qué papel jugará este Sistema Institucional de Calidad?, por ejemplo, como elemento importante para la futura acreditación institucional. Porque una cosa son las normas de calidad y otra totalmente distinta es elaborar y socializar un “Sistema de Calidad”. Y es ahí donde las comunicaciones fortalecen el trabajo permanente de toda la institución. Lo mismo ocurre con los procesos de acreditación de pregrado. La calidad tiene que estar en todas las carreras por igual”.

¿De qué manera el diseño de ciertas estrategias de mejora continua motiva y compromete a los integrantes de la comunidad académica en un proyecto de desarrollo institucional?

“Estas estrategias de calidad serán un soporte para todo nuestro cuerpo académico. Por ejemplo, las personas que quieren ser Decano o Vicedecano, en cualquiera sea la Facultad, lo hacen porque tienen una vocación de servicio. Y si la Universidad entrega un marco basal de gestión, actualizado y con miras al futuro, mejor aún. Siempre es bueno que existan condiciones mínimas, pero es mejor cuando se genera unión entre todas las entidades del plantel”.